Spam en navidad

Las nuevas canciones navideñas y de fin de año deberían ser: “Navidad, navidad, feliz navidad, alegría y mucho spam en esta Navidad” o “Año nuevo, vida nueva con spam y prosperidad”.

Las redes sociales, además de estarnos embruteciendo lentamente, nos están convirtiendo en personas menos afectivas. Gracias al mal uso de WhatsApp, las personas ya no llaman para desearte una feliz navidad y un próspero año nuevo, ahora envían en masa vídeos, imágenes y GIF totalmente impersonales. La acción es simplemente una réplica de los mensajes que otros les reenvían. La gente, para ” descomplicarse la vida “, envía uno de los tantos vídeos que recibe.

En Navidad y Año Nuevo, me llamaron los de siempre, aquellos que están en mi corazón. Para mí, los mensajes de voz por WhatsApp también cuentan como una llamada. Sin embargo, de la demás gente, fueron pocos quienes enviaron un sincero y cálido deseo de feliz navidad y próspero año.

Para Navidad recibí el mismo vídeo 76 veces, sí, 76 veces, y para rematar, era un vídeo feo y soso. Además, tuve una persona que, a las 12 de la noche del 24 de diciembre, me envió 23 vídeos distintos, 11 imágenes y 9 GIF, pero nunca me escribió “Diana, te deseo una feliz navidad”.

Este fulano se dedicó el 24 a compartir todos los mensajes de Navidad que le llegaron. Son personas como él (sin oficio) las que congestionan WhatsApp y lo hacen colapsar. Estuve a punto de bloquearlo, pero me dije a mí misma: “Voy a ver cuántas cosas va a enviar”.

El 24 estuve a punto de convertirme en un grinch, pero respiré hondo y el espíritu navideño volvió a mí.

Después del 24 me preparé psicológicamente para la avalancha de spam que iba a recibir por WhatsApp el 31 de diciembre. En su momento, supuse que sería peor, debido a que en Año Nuevo la gente se vuelve más intensa, y no me equivoqué.

Sinceramente, no recuerdo que el 24 y 31 de 2016 estuvieran tan bombardeados de spam. El 31 de diciembre fue una pesadilla, a pesar de que WhatsApp se cayó durante aproximadamente una hora, la situación fue peor que el 24.

Recibí más de 100 veces los mismos dos vídeos y el personaje del 24 de diciembre me envió 38 mensajes entre imágenes y vídeos.

Se supone que estas dos fechas deberían acercarnos a las personas, generar en nosotros un sincero deseo de lo mejor para los demás. Si realmente queremos enviar un mensaje de Navidad o Año Nuevo, debemos tomarnos un poco de tiempo para redactarlo, es casi el mismo tiempo que se toma al reenviar una y otra vez cadenas.