La Histéresis Económica colombiana causada por shock de demanda, la mezquindad del gobierno y la indolencia de los gremios económicos
La Histéresis Económica es un fenómeno de la economía en donde una situación de alta tasa de desempleo producida normalmente por un shock en la demanda (causando un recesión económica) se posterga en el tiempo, pese a comenzar una recuperación; independiente de la forma que esta tenga (v, u, L), esto se da porque las organizaciones para sobrevivir en el tiempo, que es su objetivo final (se logra aumentando las ventas esto ocasiona que aumenten los ingresos y las utilidades) cuando hay una recesión tratan de disminuir los costos y la forma más fácil es despidiendo personal para tratar de sobrevivir, adaptar su cadena de valor y su producción de la manera más eficiente para producir con menos empleados (trabajadores que son menos eficientes), una vez empieza el camino de la recuperación no tiene la motivación de contratar a más personal, ocasionado el fenómeno económico de título de la columna y esto es lo que va a ocurrir en el mercado laboral colombiano si continua la tendencia hasta el momento.
Como explico en unas columnas anteriores (Leer Crónica de una recesión anunciada UNO y DOS), la economía colombiana ha mostrado alarmantes señales de debilidad en los últimos 10 años, al contrario de lo que diga nuestro Ministro de Hacienda, si analizamos las variables macroeconómicas agregadas:
- Con una tasa de desempleo en promedio de 10% en el 2019 y con un déficit en cuenta corriente de 4,3% con respecto al PIB en el 2019.
- Con un déficit fiscal de 2,3% en promedio con respecto al PIB para el 2019, gracias a que nuestro ministro es un mago creativo de las finanzas públicas, incorporado como ICL (Ingresos Corrientes de Libre Destinación) los dividendos extraordinarios de Ecopetrol de 6,3 billones en diciembre (ingreso de capital) y en un concejo de gobierno extraordinario borró los $3,1 billones de pesos de gasto de gobierno, logrando así un superávit primario, entre otras medidas, que las calificadoras de riesgo no le creyeron la mentira.
- Y un crecimiento de 3,3% para el 2019, pero si se analizan los sectores importantes de la economía como: industria, minería, construcción y agricultura, este no llega ni 0,5% del crecimiento del PIB para el 2019.
Esto se debe a que seguimos con la misma tendencia anterior de superávit primario, en la que tenemos un Ministro de Hacienda que además de ser economista es mago y cambió la metodología como se mide el PIB. Entrando en nuevos sectores en donde no se tiene la serie de tiempo clara ni los deflactores bien definidos, lo que hizo que nuestro PIB aumente tanto y además con sectores como los financieros creció, pero que en realidad no es un crecimiento real de la economía.
A demás una matriz económica donde predominan los commodities (petróleo y el carbón), con bajos precios internacionales antes del efecto SAR-COVID 2 (disputa Rusia, Arabia Saudita) estas explotaciones de materias primas son intensivas en capital y no generan los empleos suficientes que la economía colombiana necesita, continuando con la maldición de los commodities.
De la misma manera que lo hizo Venezuela en las décadas de los 80 y 90. Y tanto que nos burlamos del hermano país, estamos igual que ellos en esa época, con un desarrollo industrial y agrícola inexistente gracias a las ventajas comparativas de David Ricardo y Samuelson (leer aquí) y vamos con la misma tendencia en lo económico, que los tiene a ellos actualmente sin industria y un sector agrícola pequeño.
Este año -oficialmente- vamos a entrar en una recesión para el tercer trimestre, si hablamos técnicamente.
Según proyecciones del Banco de la República, la economía puede decrecer entre -5% y -7%, una proyección parecida en este mismo rango dio Fedesarrollo, algunos analistas más negativos dicen que puede estar entre el rango de -10% y-13% el decrecimiento de la economía colombiana; para el 2020 este es el rango que pienso en el que puede estar según mi predicción, con una recuperación en forma de L, que se puede dar en el último trimestre de 2021, pero todavía la situación es muy incierta.
Pero los datos de las variables agregadas, como el PIB, empleo, la balanza de pago, están mostrando una situación muy crítica, en marzo de 2020 la economía tuvo un decrecimiento de -4,9%, siendo en las dos últimas semanas donde se sintió el efecto de la pandemia en el PIB.
El primer trimestre de 2020 dejó un crecimiento de 1,1%, en los sectores más afectados por el precio de petróleo y el Sar -Covid 2, los cuales fueron:
- La construcción, un sector intensivo en mano de obra, el cual decreció un -9%, pero venia mal desde 2019.
- Las actividades artísticas, sector nuevo -con interrogante de su medición- que decreció en un-3,2%.
- La industria manufactura, la cual decreció en un -0,6%, que es intensiva en mano de obra.
- Las exportaciones disminuyeron en un -8,1%, en una proporción mayor a las importaciones que fueron de -5,3%, como lo muestra esta tendencia este año fácilmente el déficit en cuenta corriente puede llegar al 6% del PIB.
Y con el déficit fiscal que puede estar en 6,1%, según la regla fiscal seguimos con los déficits gemelos. Esto nos demuestra que nuestro crecimiento en estos últimos dos años es débil.
Se debe más que todo al endeudamiento y a una economía informal, que es lo que ha hecho que crezca, pero por los efectos de la pandemia está eliminado este crecimiento informal. La economía colombiana tiene un gran componente de informalidad, al que nos hemos acostumbrado.
Toda esta tendencia tiene consecuencias en el mercado laboral y esto se ve en la información entregada por el DANE para el trimestre móvil enero- marzo de 2020.
Con una tasa de desempleo que fue de 12,6 %, aumentando en 1,8% con respecto a marzo de 2019 y un aumento en valores absolutos de 1,5 millones de desempleados.
VARIACIÓN ABSOLUTA (MARZO 2019-2020) | VARIACIÓN % (MARZO 2019-2020) | |
OCUPADOS | 1.583 MILLONES DE PERSONAS | -7,20% |
DESOCUPADO | 287 MIL PERSONAS | 10,70% |
INACTIVOS | 1.792 MILLONES DE PERSONAS | 12,40% |
VARIACIÓN ABSOLUTA (MARZO 2019-2020) | VARIACIÓN % (MARZO 2019-2020) | |
OCUPADOS | 1.583 MILLONES DE PERSONAS | -7,20% |
DESOCUPADO | 287 MIL PERSONAS | 10,70% |
INACTIVOS | 1.792 MILLONES DE PERSONAS | 12,40% |
Elaboración propia con datos DANE
Pero si analizamos las otras variables de empleo, la tasa desempleo en realidad puede estar alrededor del 17%.
Como se analiza en la tabla, la tasa de desempleo no recoge todo el panorama del mercado laboral, nos mostraría todo el panorama si analizamos todas las otras variables.
Esta radiografía es muy preocupante, en gran parte por el efecto de la pandemia y las debilidades que traiga a nuestra economía.
La tasa de ocupados disminuyó en un -7,2% para el mes de marzo 2020, es decir menos personas están trabajando, igualmente subió la tasa de desocupados en un 10,70% para el mismo periodo de referencia; esto hizo que aumentara la tasa de inactivos en 12,4%, es decir, muchas personas perdieron el empleo, pero por la cuarentena no buscaron trabajo o no están motivados, esto hace que en realidad la tasa desempleo gire alrededor de un 17%.
Esto traerá como consecuencia que en el segundo trimestre de 2020 el desempleo sea peor, según proyecciones de Fedesarrollo la tasa de desempleo puede llegar a un 20% a final del año. En mis propias proyecciones, calculo que puede ser de alrededor de un 25%.
Con una tasa de informalidad nacional para el trimestre móvil diciembre 2019-febrero 2020 de 47,9% con respecto a la ocupación.
Mostrando primero, las débiles bases de crecimiento que tiene la economía colombiana, que tiene como sustento la informalidad y el endeudamiento, el cual no es sostenible en el largo plazo, como está pasando y esto es lo que está afectando al mercado laboral.
Que se caracteriza por tener fuertes tasas de desempleo e informalidad, en estos últimos años y ahora más agravado por la pandemia que afecta mayormente a los informales e independientes, que son el 40%, la nueva clase social de Colombia -los vulnerables-, lo que muchos analistas sabían pero que a penas el gobierno se dio cuenta ahora.
Los independientes vulnerables que tienen la economía colombiana, que no son pobres, pero tampoco pertenecen a la clase media, son la clase sándwich, que no califica para ayudas según la metodología de la medición de DANE, un criterio sesgado que no es verdad, creado en el gobierno de Santos para disminuir la pobreza, quien puede vivir para satisfacer sus necesidades básicas con 250 mil pesos no está dentro de la línea de pobreza monetaria.
Estas familias sándwich con ingreso promedio de 450 mil pesos, que está por encima de la línea de pobreza monetaria y que son las personas que van a caer en la pobreza cuando pierdan su empleo informal, la gran mayoría son los que van a aumentar la tasa de pobreza.
Según el informe de la Universidad de los Andes, el 15% de la población colombiana, es decir unos 7,3 millones de personas en promedio, van a caer en la pobreza, es decir, en la línea de pobreza monetaria, que va a pasar del 27% de la población total de Colombia (dato más actualizado de Dane 2018) a el 42% de la población para el 2020.
Es decir, por la falta de trabajo y perdida de sus ingresos las familias vulnerables de Colombia van a pasar a ser pobres, porque no pueden satisfacer sus necesidades básicas, entrando a la pobreza.
Esto lo ha producido, lo que yo llamo “el crecimiento vulnerable de Colombia” en los últimos 28 años desde el presidente Gaviria, esto lo que va a ocasionar es una alta tasa de desempleo en los próximos años, que muy difícilmente se va a poder corregir; primero porque nuestra recuperación parece ser que se va a dar en forma de L, es decir muy lenta.
A demás, si no se cambia el modelo y se sigue dependiendo de los commodities esto va a traer como consecuencia que se siga teniendo un “crecimiento vulnerable”.
Hay que hacer un cambio en el modelo e industrializar la economía, cambiar el modelo neoliberal de libre mercado, por un modelo exportador industrial, es decir, neo industrialización por sustitución de importaciones, adaptados a estos tiempos de globalización pasiva (leer aquí), además esto va producir una Histéresis Económica por largo tiempo, explicada en párrafos anteriores.
Pero esta Histéresis va a estar profundizada por la mezquindad del Gobierno de la manera siguiente:
Este shock afectó primero a la oferta y después paso a la demanda, donde va a tener su impacto más fuerte y duradero, es decir, las personas van a perder sus puestos de trabajo, por lo tanto, sus ingresos y esto afectando el consumo interno, que es un jalonador de la demanda agregada.
También va a disminuir la inversión de las empresas porque sus ventas van a bajar, por lo tanto, sus ingresos y utilidades; esto trae como consecuencia que las organizaciones disminuyan costos (despidiendo personal) y realizando menos inversiones.
Esto afecta el gasto del Estado, por lo tanto, por el multiplicador de la demanda el PIB va a disminuir más que proporcional PIB=C+I+G (exp-IMP) y es lo que el Estado debe evitar con una política fiscal expansiva, aumentando el gasto anticíclico, dando subsidios a la empresa para el pago de nómina, pero no el 0,6%, que es una ayuda muy mediocre a las organizaciones. Anif y Fedesarrollo calculan que un promedio de la ayuda para pagar la nómina debe estar entre el rango de 1% y 1.2% del PIB de Colombia.
Estas ayudas a mi parecer debían ser del 1% del PIB, que equivale a 10 billones de pesos. Como mínimo como primera fase, dependiendo de como siga la cuarentena y la economía, para que el empleo no se pierda ni los ingresos de la organizaciones y familias. Las ayudas deben ser más que focalizadas en las PYME que tienen el 96% del tejido industrial de Colombia y emplean a 17 millones de colombianos, para que sea más efectivo y ayudar las empresas con más subsidios, con una tasa de interés más baja para mantener su flujo de caja.
Pero esto se logra con un política monetaria y fiscal coordinada, es decir, necesitamos emisión del banco central urgente, que este le haga un préstamo al ejecutivo comprando bonos al Banco de la República.
Esta emisión debe ser equivalente al 13% del PIB, que es de $130 billones de pesos para que el gobierno pueda ayudar a todos los agentes económicos, familias, empresas, entes gubernamentales, municipios, departamentos, distrito que están insolventes y que los bancos como Findeter, de segundo piso, por la emergencia se conviertan en bancos de primer piso, prestando dinero directamente a las PYME, necesitamos tener dinero, la estrategia del Dinero Helicóptero que se carga con la gasolina de la relajación cuantitativa del Banco Central, cada minuto que pierde es un gran costo de oportunidad aumenta la probabilidad de que el motor de la economía se funda.
Si nos comparamos con el vecindario de países latinoamericanos vemos la mezquindad del gobierno, como ejemplo: Perú con ayudas estimadas de 12% de su PIB, Chile con ayudas de 6,64% de su PIB, Brasil con ayudas de 9,5% y Argentina pese a su situación económica con ayudas 5,56% de PIB.
Y las potencias del mundo, Estados Unidos aprobó un plan de ayudas de US$2,3 billones (11% de su PIB), el cual fue complementado con otros US$484.000 millones de ayudas a PYMES y la salud. En total alrededor del 13% de su PIB.
Alemania es uno de los países que ha ido incluso más allá, y su estímulo fiscal se acerca al 28% de su economía, una cifra similar al 26,4% que ha dado Gobierno de Italia. El 21% de Japón, el 18% de Reino Unido.
Este desempleo y recesión, va a desencadenar una Histéresis en la economía por su indolencia, en vez de pedir una mini reforma laboral que va a causar más recesión y desempleo, como expliqué en párrafos anteriores.
Lo gremios deben hacer lobby al Banco de la República y al gobierno para que cedan a hacer una relajación cuantitativa y esta se dé en el marco de una política monetaria y fiscal coordinada, para hacer las ayudas de manera efectiva a sus agremiados, ahora que la tendencia de inflación es baja, como lo demuestran los precios de los commodities, entre otros (Leer artículo sobre Avianca) y no seguir el modelo de escorpión. Esta es la única manera de disminuir el desempleo y no ocurra la Histéresis.
Posdata: pagando por horas la Seguridad Social, como quieran plantear ahora la mini reforma laboral en la emergencia económica, lo que va traer es informalidad y menos gente se va pensionar y lo que expuse en mi artículo sobre Colpensiones, les dejo el link aquí.
Pingback: El engaño del Gobierno Nacional a los colombianos sobre las cifras de ayudas - The Cartagena Post