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Concejo debate sobre estampilla para universidades Nacional y Distrital

Con el respaldo de todas las bancadas del Concejo de Bogotá se inició ayer el debate para reglamentar la Ley 1825 de 2017, mediante la cual se asignan recursos vía estampilla a la Universidad Distrital y a la Universidad Nacional de Colombia (U.N.).

El proyecto, que determina que el 70 % de los ingresos será para la Universidad Distrital y el 30 % para la Sede Bogotá de la U.N., incluye un cobro por 30 años a partir del momento en que entre en vigencia.

La Universidad Distrital y la U.N. esperan el respaldo del Concejo de Bogotá para que la tarifa de recaudo sea del 1,5 %, lo que les permitirá a estas instituciones tener recursos más sostenibles.

Según explica Jorge Torres, concejal del Partido Verde y uno de los ponentes del proyecto, esta estampilla favorecería la educación pública superior en Bogotá.

“Hemos puesto todo el empeño en este proyecto, buscando que la administración, las universidades y el mismo Concejo contribuyan a seguir brindándole recursos a la educación superior, que redunden en mejorar la calidad y aumentar la cobertura”, comentó el concejal Torres.

Los concejales David Ballén Hernández y Roberto Hinestrosa Rey también fueron ponentes de esta iniciativa, a la que se agregó una serie de mecanismos diseñados para garantizar el manejo eficiente y transparente de estos recursos, y para que todos los bogotanos que aportan vean en qué se está invirtiendo el dinero.

“El Concejo de Bogotá tiene una apuesta para respaldar la iniciativa. Se espera que en la siguiente sesión se discuta el articulado y que sea aprobado en la Comisión de Hacienda; luego de eso se envía a plenaria para que el pleno del Concejo vote a favor o en contra”, puntualizó el concejal Torres.

Impulso a la educación

Por su parte, el profesor Jaime Franky, vicerrector de la U.N. Sede Bogotá, agregó que al escuchar las distintas posturas frente al proyecto se percibe que el conjunto de los concejales está de acuerdo en apoyar e impulsar la educación superior pública en Bogotá.

“Contar con más recursos para la educación superior es imperativo en este momento: de una parte, permitirá nuevos desarrollos tecnológicos y hacer una ciudad más competitiva, y de otra, la tasa de retorno de la inversión en educación es favorable si se consideran tanto los ingresos que los profesionales le generarán a Bogotá, como el desarrollo de la capacidad de emprendimiento que produce la educación superior”, agregó el vicerrector Franky.

El directivo resalta que en caso de aprobarse los recursos serán utilizados en lo que determina la ley misma. Para esto, la U.N. ya está trabajando en la construcción de un plan de recuperación integral de los bienes de interés cultural, y ya se tiene una priorización de los edificios que deben ser intervenidos.

También se espera hacer una fuerte inversión en laboratorios e infraestructura tecnológica para investigación, para lo cual se está trabajando en un plan maestro, de tal manera que al momento en que lleguen los recursos se tengan claras algunas líneas y proyectos de inversión.

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