Los artistas Mariana Telleria y Adrián Villar Rojas exhiben juntos en una galería mexicana
Los artistas argentinos Mariana Telleria y Adrián Villar Rojas coinciden en la galería kurimanzutto de México, que lleva adelante el proyecto “Siembra”, donde la primera presenta el registro de su intervención “Las noches de los días” mientras que el rosarino despliega tres obras de la serie “Rinascimento”, en la que explora la fragilidad de la materia.
Hasta el próximo 14 de diciembre en colonia San Miguel Chapultepec permanecerán ambas exposiciones de los artistas santafesinos (Tellería es oriunda de Rufino y Villar Rojas, de Rosario) en un proyecto orgánico que pretende desplegar las prácticas artísticas emulando “la época de la siembra en la agricultura”, donde convergen “la polinización cruzada, el cultivo del pensamiento y los experimentos en diversidad para llegar a una posible cosecha”. Exhiben también los artistas Paloma Contreras Lomas, Eduardo Abaroa y Jou Morales.
Telleria presenta en tierra azteca el registro de su intervención realizada en 2014 en Rosario, cuando la ciudad amaneció convulsionada ya que el tradicional Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino cambió su habitual color exterior y fue pintado enteramente de negro.
“¿Arquitectura o vandalismo?”, “¿Arte o falta de respeto”, se preguntaron los medios por aquel entonces en referencia a una intervención artística que además de señalar lo que ya estaba ahí y llevarlo a la primera plana del diario, restableció, a través de una disrupción violenta, la existencia de lo público en tanto fuerza compleja que construye activamente lo social.
En “Siembra 34”, la artista que representó a la Argentina en la Bienal de Venecia 2019, propone un dispositivo museográfico construido ex-profeso que apunta a traducir mediante recursos plásticos y formales aquella experiencia del 2014 ocurrida en la tercera ciudad argentina por número de habitantes.
Por su parte, “Siembra 35” alberga las obras de Adrián Villar Rojas sin título de la serie “Rinascimento”, un conjunto de refrigeradores caseros con una vitrina en el congelador a través de la cual pueden observarse diversas composiciones realizadas a partir de elementos naturales y procesados, tales como fruta, pescado, cervezas, hongos, huesos y carne animal (similar a la que estos días exhibe la galería Benzacar).
Durante el transcurso de la exposición, estas naturalezas muertas, fijas en el tiempo, se van cubriendo de escarcha y cambian poco a poco, a causa del efecto de la temperatura sobre los tejidos y la materia: un futuro híbrido que preconiza la ruina ecológica a la que nos enfrentamos.
La flora y fauna empleadas en cada composición han sido minuciosamente escogidas por el artista y reflejan la extensa cadena de suministro y producción de alimentos a nivel nacional e internacional.
Villar Rojas crea un objeto híbrido y una imagen que es en simultáneo permanente y efímera: mientras se mantenga la temperatura glacial, la composición exuberante permanecerá en su sitio, pero al mismo tiempo depende del suministro de electricidad y del funcionamiento de un objeto mecánico, muchas veces creado con una obsolescencia programada.
“Siembra” es una manera de la galería kurimanzutto de reimaginarse después de más de 20 años de existir, un espacio que conjuga artistas de diferentes edades y disciplinas que coinciden en experiencias, temas y sensibilidades de manera similar a las relaciones entre las cosechas de un sembradío.