La columna de AlfredoOpinón

BREXIT: ¿SE HARÁ?

BREXIT es la abreviación de la expresión “Salida Británica”. Se trata de la decisión del Reino Unido (RU) de retirarse de la Unión Europea (UE). Será la primera vez que ocurra la salida de un país de la UE. El Reino Unido es la quinta economía mundial  y la segunda de Europa. Londres es el centro financiero más grande del mundo.

En el mes de junio del 2016  y como resultado de una consulta a los ciudadanos británicos, promovida por el Primer Ministro Camerón, que buscaba mantener al Reino Unido (Escocia, Gales, Inglaterra e Irlanda del Norte) dentro de la Unión Europea (28 países), dio como resultado –ajustado-, que los británicos querían retirarse de la Unión. Quizás los ciudadanos sintieron más el temor que de continuar les afectaría, con una futura pérdida de empleos y la disminución de inversiones. Un eslogan de la campaña para el retiro decía: “La claridad está bien, el libre cambio está mejor”

Alfredo Oliveros. Egresado como Contador Público de: Universidad de la Rep. del Uruguay y Universidad de Buenos Aires (Argentina). Master en Economía Internacional de la Universidad de Belgrano (Argentina). Docente en Economía en distintas Universidades de América Latina. Contratado como asesor por distintos Gobiernos de América y asesor de distintos programas del BID (Banco Interamericano de Desarrollo)

Desde Julio del 2016 el cargo de Primer Ministro británico lo ocupa Theresa May, que dirigirá el proceso del retiro. La solicitud estaba prevista hacerla para marzo del 2017.  El documento a presentar a la UE, solicitando dicho retiro, deberá contar con la previa aprobación de las Cámaras (la De los Comunes y la de Lores).A principios de febrero del 2017,  la Cámara de los Comunes aprobó un proyecto. Pasó a la otra Cámara. Pero en la Cámara de los Lores se observa que en el documento nada se dice sobre la futura situación de los ciudadanos europeos y sus familias, que residen legalmente en el Reino Unido, así como los miembros de su familia. Que deberán ser tratados, tras el Brexit, de la misma forma, en cuanto a sus derechos, como comunitarios. Se plantea esa incorporación al documento. Además la Cámara de los Lores propone se incluya, que las Cámaras Británicas hacen una reserva de derecho para  revisar el documento final acordado para el  retiro. Solicitud que también hac Escocia,donde ganó el No del retiro.

En esta primavera europea, se ha llenado de especulaciones sobre el futuro de la Unión Europea y del Reino Unido. Algunos analistas proponen considerar únicamente la aprobación inmediata de un tratado de unión aduanero entre las dos entidades, dado que la culminación del retiro podría demorar 2 años. Pero otros consideran imprescindible facilitarle al Reino Unido la posibilidad de negociar nuevos acuerdos aduaneros con la Unión Europea y cualquier otro país, para permitirle armar su futuro de comercio.

La incertidumbre reinará por un periodo. Habrá quienes estarán atentos a la tramitación de las condiciones del retiro, para elaborar sus estrategias. Se encuentran  reflejadas en titulares de prensa, como: “ China esta lista a sacar partido de una Europa dividida y de un Reino Unido debilitado luego del Brexit”; “Los proyectos prefieren optar por el “wait and see” (esperar y ver)”.

Los países emergentes  pueden verse afectados por el Brexit de manera indirecta, si disminuye la economía mundial y se reduce el comercio internacional. De ahí que sea necesario conocer las propuestas definitivas  que resulten de ese retiro.

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