POT bien hechos ayudan a combatir la corrupción
Las ciudades tienen un impacto tan importante en los municipios aledaños, que en esos lugares están copiando planes de ordenamiento territorial (POT) que no corresponden a sus necesidades.
El ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio, Camilo Sánchez Ortega, aseguró, en el foro nacional “20 años de ordenamiento territorial experiencias y desafíos en el posconflicto”, que en muchos municipios se ha detectado a personas vendiendo las formas de presentar los POT, y, como muchos de estos territorios no tienen recursos, esas personas les ofrecen entregarlos, pero les deben dar la contratación del mismo.
“Se están copiando planes de ordenamiento de otras ciudades en municipios distintos, generando dolores de cabeza, como la plusvalía, que atrae a la corrupción en casos como la expedición de licencias. Desde el Ministerio se están buscando cerrar esas brechas para evitarlo”, asegura el alto funcionario.
También señaló que los 20 años de la Ley 388 de 1997 han sido importantes a la hora de hacer un balance de la cultura de planeación de los territorios del país, pues se han detectado las debilidades de los territorios municipales para autogestionarse de acuerdo con sus necesidades, y el uso político que se les está dando a los suelos en Colombia.
Para Carlos Felipe Prada, representante del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), por medio del censo se ha podido identificar la planeación y el desarrollo territorial del país.
El funcionario del DANE menciona que en los estudios realizados se ha manifestado una tendencia a los aumentos de población en las zonas urbanas, lo que obliga a las ciudades a construir y distribuir mejor las zonas para vivienda, su función social y ecológica.
“La tendencia preocupante es que las zonas rurales están siendo absorbidas por la ciudades, dejando poco margen a la actividad agrícola”, añade el funcionario.
Por su parte, el profesor Carlos Alberto Patiño, director del Instituto de Estudios Urbanos (IEU) de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), considera que el Plan de Ordenamiento Territorial no es un asunto ligero, “es un tema urbano que cada vez se vuelve más trascendental, vinculando necesariamente lo rural en forma permanente”.
“El país tiene un 77 % de la población urbana que habita esos lugares, y creemos que estos cálculos en los próximos años pueden alcanzar un 85 %”, agrega el profesor de la U.N.
El Ministerio de Vivienda, actualmente, está desarrollando evaluaciones a diversos POT en Colombia, para medir el uso real del suelo con las diversas oportunidades para el bien común. “Colombia tiene 1.102 municipios que entendieron sus POT de manera gradual, y hoy se tiene la oportunidad de adelantar cerca del 90 %”, manifiesta el ministro de Vivienda.
Territorios en riesgo
Los planes de ordenamiento territorial pueden expresar en sus diagnósticos si el crecimiento de la ciudad responde o no a las características de los POT a nivel legal. Por ello, David Pinilla Calero, viceministro de Vivienda, asegura que la importancia de estos contribuirá a conocer cuáles son los territorios donde se puede construir.
“Sabemos que la naturaleza está recuperando sus territorios y no queremos que pasen nuevamente tragedias como el desbordamiento del río en Mocoa (Putumayo), donde había hogares que no debían estar allí; con los estudios del DANE y del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), en el tema catastro multipropósito se crearán buenos POT”, expone el funcionario público.
Gustavo Marulanda, asesor del IGAC, manifiesta que el enfoque multipropósito es aquel que dispone información predial para contribuir a la seguridad jurídica del derecho de propiedad inmueble, al fortalecimiento de los fiscos locales, al ordenamiento territorial y a la planeación social y económica. Con esta información se puede tener un manejo de la tierra y desarrollo rural, y de esa manera combatir la corrupción.
Esta temáticas fueron abarcadas en el marco del Foro, que busca articular las experiencias y desafíos en ordenamiento territorial con los proyectos de interés nacional, llevado a cabo en el Centro de Convenciones Alfonso López Pumarejo, Edificio Uriel Gutiérrez, de la U.N. Sede Bogotá.