Nuestro alcalde, un ejemplo de oscuridad y discordia
¡Sensatez! En tiempos difíciles lo que se necesita es sensatez. Serenidad en el alma para en paz y armonía tomar las decisiones correctas. Y aunque parezca un cliché y un discurso rallado, se requiere unidad, trabajo en equipo, paz, cordialidad, perdón, dejar a un lado las culpas y señalamientos. Encerrar los egos. No existe otra manera para salir de los momentos difíciles sino a través de la unión y la paz.
Creo que, como ciudad, como pueblo, desde la cabeza, nuestros dirigentes políticos (alcalde y concejales), los gremios, empresarios hasta los ciudadanos a pie no hemos aprendido la lección que esta pandemia le está enseñando al mundo.
Seguimos siendo un pueblo soberbio, agresivo, combativo, lleno de discordia, odios, señalamientos, con la piedra en la mano para lanzarla a aquel con el que no concuerdo o a aquel que creo culpable. Estamos en épocas que requieren humildad en el corazón para poder trabajar por lo más importante: la vida.
William Dau ya no es veedor, que tiene la función de denunciar y acusar a los que él pueda considerar corruptos. Dau es el alcalde ¡El alcalde! Y de él se requiere ACCIÓN.
Los ciudadanos requieren que se trabaje sin parar, de manera extraordinaria para proteger la vida y el bienestar de todos. El trabajo es en muchos frentes: pobreza y alimentación, seguridad y la preservación de la salud y la vida. Es precisamente en este último frente donde se requiere la acción y el trabajo más arduo.
Cartagena necesita Unidades de Cuidados Intensivos, muchas UCIS con respiradores, tener en ejecución, funcionando un plan de contingencia ante el futuro colapso de los hospitales.
Ya deberían existir firmados y como mínimo en ejecución los contratos de las nuevas Unidades de Cuidados Intensivos, de los respiradores. Ya deberían existir los contratos de todos los implementos médicos que se requieren para enfrentar los momentos más duros de esta pandemia, a los que próximamente nos vamos a enfrentar.
¿Dónde están los hospitales de campaña listos para atender y aislar a los enfermos que requieran atención médica? Mientras Barranquilla, Medellín, Bogotá y las demás ciudades ya los tienen casi listos y algunos ya preparados para recibir a los enfermos en Cartagena, NADA.
Y estos anteriores puntos son las preguntas que los concejales le han hecho al alcalde y que no responde con claridad y con hechos. Preguntas que no tienen respuestas hoy. No hay hechos aún que permitan saber que se está trabajando para salvar las vidas de los enfermos.
El alcalde se molesta cuando el concejo le pregunta:
¿Dónde están las nuevas Unidades de Cuidados Intensivos que se necesitan?
¿Dónde, cómo y cuándo las van a comprar?
¿Cuántas van a adquirir?
¿Dónde las van a colocar?
¿Cuántas camas nuevas van a habilitar?
¿Dónde están los contratos que evidencien que esto se está haciendo?
No son preguntas por joder y no dejar trabajar. Eso es lo que se requiere para salvar vidas y para que los cartageneros no caigan muertos en las calles como en Guayaquil, Ecuador.
Y leeré a muchos diciéndome “no seas negativa, eso no va a suceder aquí” ¿No? ¿Cuántos espejos necesitamos para darnos cuenta que esa es HOY la realidad mundial? Eso es lo que está sucediendo en todos los continentes y para allá vamos.
Y tristemente, hoy, Cartagena no está preparada para afrontar un colapso total del sistema de salud. No tiene camas, no tiene respiradores, no tienen los lugares nuevos necesarios y adecuados para atender a los enfermos.
Mientras en otras ciudades ya tienen equipados coliseos, hoteles, centros de convenciones. Ya hicieron contratos para la compra de los equipos médicos e implementos necesarios, en Cartagena NADA.
Están en “proceso” de sentarse a analizar qué y cómo hacer. Paradójicamente, sale primero el contrato de la compra de una aplicación para el celular que dice como va el número de enfermos de Covid-19 y no sale el contrato de compra de respiradores ¿Qué crees que necesita un enfermo? ¿Una App para su celular o un respirador? Acaso el informe de contagios no lo da el Gobierno Nacional todos los días por todas las redes sociales, medios de comunicación y ya existe una aplicación que desarrollo la nación para informar a los ciudadanos sobre la enfermedad ¿Qué crees que es prioritario una aplicación móvil o una Unidad de Cuidados Intensivos? Con lo que costó esa aplicación se puede comprar una UCI, que salva vidas.
Y esto es lo que el Concejo de Cartagena le ha preguntado incesantemente al alcalde desde antes que existiera el primer contagiado. Pero William Dau se molesta con estas preguntas, las evade, las responde con mentiras, como el supuesto barco hospital que iba a tener la ciudad. Y en vez de responder con hechos acusa a los concejales de persecución por preguntarle lo que es realmente importante para salvar nuestras vidas.
Yo no se lo pregunto, yo le exijo al alcalde ACCIÓN. Que le muestre a la ciudad clara y concretamente si ya compró o va a comprar nuevas UCIS y respiradores, con contrato en mano. Que muestre si ya están adecuando o comenzando a adecuar los espacios que se requieren para atender la crisis con en las otras ciudades de Colombia. No hay tiempo, no se puede esperar, el virus y la vida de la gente no da espera.
¿Cuándo lo va a hacer? ¿Cuándo los cartageneros caigan muertos en las calles? Y los que hoy hacen cacerolazos apoyando la grosería y la discusión, se encierren en sus casas llenos de pánico ante el horror del número de muertos en la ciudad, igual como está sucediendo en el mundo entero.
El alcalde no debería estar fomentando en sus redes sociales el odio, la violencia verbal y física, la discordia, la división de la ciudad. No estamos en tiempo de guerra sino en tiempo de unión.
Es inaudito que el líder de la ciudad se comporte como un adolescente que necesita fomentar el odio y la discordia para seguir ganando popularidad, apoyo y club de fans. No es época de egos, es época de acción, de humildad en el corazón.
Acabamos de pasar Semana Santa ¿Será que algunas de las enseñanzas que estos días entregan quedó en nuestros corazones? ¿Para qué tirar piedras y acusar si lo que se necesita es construir? ¿Qué ganamos con ofensas, palabras vulgares, discusiones y enfrentamientos? ¿Qué gana la ciudad con esto? Alguien que me responda ¿De qué le sirve al pueblo esto?
¿De vulgaridad y ofensas se come? NO ¿Con enfrentamientos y peleas se salvan vidas? NO. Entonces trabaje señor alcalde ¡TRABAJE! Con hechos concretos muestre su trabajo para salvar vidas ¡ACCIONES!
Concéntrese en lo que realmente importa, concéntrese por trabajar para lo que fue elegido, proteger la vida de sus ciudadanos. Y deje a los entes competentes la investigación, acusación y condena, Fiscalía, Procuraduría, Contraloría son quienes tienen esa labor. Usted no fue elegido para eso y menos en estos momentos tan difíciles para toda la humanidad.
Sea ejemplo de luz, no ejemplo de oscuridad y discordia. No ahogue a Cartagena en la polarización y el enfrentamiento. Todos deberíamos estar en oración, en amor, en humildad, en perdón, desde los gobernantes hasta los ciudadanos.
Son tiempos de solidaridad, de unión y de sensatez. De enfocarse en lo importante.
Hoy alcalde, tiene un pueblo encendido, con antorchas ardientes listas para lanzarle fuego a todos los que usted acusa o mejor difama, porque sin pruebas toda acusación es una difamación.
En redes sociales llueven los insultos, vulgaridades, amenazas, señalamientos y linchamientos sociales, gracias a sus acciones agresivas e insensatas, que incentivan al pueblo al oído y la violencia verbal.
Está polarizando una ciudad, dividiéndola, fomentando la violencia. Y creame, de eso NADIE debería sentirse orgulloso. Debería ser usted ejemplo de todo lo contrario, de incentivar al pueblo a se pacifico, sereno, educado, reflexivo, tolerante, respetuoso, capaz de estar en desacuerdo sin atacar, capaz de dialogar sin insultar ni ofender. Usted, alcalde, debería estar fomentando en el pueblo la unión, la solidaridad y la armonía.
Pero tristemente está haciendo todo lo contrario y con esto colocando a Cartagena, otra vez, al borde de la inestabilidad política, que usted sea sancionado y este barco quede nuevamente sin capitán por un tiempo.
Cartagena no está hoy para quedarse sin alcalde y que empiecen a desfilar alcaldes interinos. Pero parece que en usted prima más el ego, las ganas de señalar para acusar y usted figurar como el salvador. Para sentir aplausos que le alimenten el ego. Y es usted incapaz de pensar en lo que necesita la ciudad. Trabajo concreto, sensatez, paz y unión.
¡Qué vergüenza alcalde!
El artículo parece ser otro acto de discordia. Mientras se siga ennla ofenciva, en la competencia y la crítica improductiva, se sigue sumando cero mas cero.
Ofensiva
Lo mejor que he leído! Bravo.
Pura pataleta de ahogaos dándoselas de vistimas ahora jua jua