El Tribunal Constitucional de Perú se negó a revisar la condena del líder del partido gobernante
El Tribunal Constitucional (TC) peruano ratificó hoy la condena por corrupción al líder de Perú Libre, Vladimir Cerrón, tras rechazar un pedido de la defensa para que se revisara un hábeas corpus que buscaba anular la sentencia.
El TC consideró “improcedente” el recurso de apelación presentado por Cerrón al considerar que se trata de “una solicitud de aclaración” de la decisión que se emitió a mediados de julio. Remarcó además que, según la ley vigente, no caben impugnaciones contra las sentencias del tribunal.
La defensa, encabezada por el abogado Luis Huayhua Quispe, alegó que la resolución no contaba con motivación suficiente para sustentar una condena por supuestos delitos de blanqueo de capitales durante la gestión de Cerrón como gobernador de Junín entre 2011 y 2014.
La Fiscalía peruana no solo solicitó en julio que se revocara la orden de cuatro años y 8 meses de prisión suspendida de la que se beneficia actualmente Cerrón, sino también además una pena de 16 años de prisión por estos supuestos delitos de corrupción cuando era gobernador de Junín.
Igualmente, los magistrados sostuvieron que aún existe un recurso extraordinario ante la Corte Suprema, por lo que, aunque existe una condena, aún no se agotaron todos los recursos ante el Poder Judicial, según reportó el sitio del diario La República.
El mismo argumento ya había sido usado por el TC el 22 de julio pasado cuando rechazó y declaró improcedente el hábeas corpus del fundador del gobernante Perú Libre.
El 5 de agosto de 2019, un juzgado de Junín determinó que Cerrón y otros acusados “se interesaron de manera indebida en la aplicación del plazo Nº 3 de la obra ‘Mejoramiento y ampliación del sistema de Agua Potable y Alcantarillado de la ciudad de la Oroya’, para favorecer al Consorcio Altiplano”.
Esa condena le impidió ser candidato a vice del ahora presidente Pedro Castillo.
Actualmente, Cerrón también está involucrado en el caso que la prensa llama “Los Dinámicos del Centro”, una organización que otorgaba irregularmente licencias de conducir a cambio de sobornos y en otra carpeta fiscal por presunto lavado de activos.