Controversia y realidad
Señor le tomo su pedido me dijo el mesero, a lo cual yo le respondí: tienes lomito fino? y él amablemente me dijo: el mejor novillo de dos años que puede consumir a término medio y se lo hago acompañar de vegetales calientes, frescos o puré.
No había terminado de ordenar cuando en una mesa contigua a la que ocupaba, un señor de canas visorosas y rostro sabanero se dirigió a mí diciendo; le voy a sonar el clarín y continúo, usted ha pedido un lomito que normalmente los supermercados y restaurantes gourmet sirven de carne de novillos de 23 semanas.
Primer tercio, le separamos de la teta de su madre para poder utilizar la leche con fines comerciales, y a muchos les capamos sin anestesia aplicándoles yodo, azul de metileno o sal y limón, operación que según criterio de algunos también permite ganar peso más rápido.
Segundo tercio lo limito a potreros pequeños y estabulados; menos caminar, menos gastos de energía, más peso y más utilidad. Tercer tercio, a los dos años lo conducimos al matadero donde en fila escuchan el berreo del degüello para satisfacer la necesidad de muchos, y se lo servimos a usted con vegetales. Ahora dígame, ha pensado usted que un toro de casta nace sin que lo separen de su madre, vive cuatro años libre, su genética es guerrera, ataca al caballo en el ruedo una y mil veces eliminando muchísima adrenalina que le permite soportar cualquier herida.
Indiscutiblemente la lidia no es agradable para el toro, aunque estudios demuestran que sufre mucho menos de lo que usted y yo pensamos. Al animal le puede más el afán de lucha que el dolor, su actuar es codificado en su herencia genética que le otorga sus características esenciales en cuanto a morfología y comportamiento. El dolor de los animales no es como el humano, que es más mental que físico por eso incluyendo al rey de la selva, el león, cuando está enfermo se retira a morir sin hacerle resistencia a la vida a la que tú y yo nos apegamos; eso lo entiendes cuando estás en el campo y un toro le da una cornada a otro pero al día siguiente está igual.
La información genética que aporta el toro de lidia a través del cromosoma “Y” hace única a esta raza en el mundo según un estudio de las universidades de Sevilla y Córdoba, y del Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (SERIDA) de Asturias en España.
No te he dicho que el cerdo encerrado vive de 5 a 6 meses y el pollo 42 días para su sacrifico, y que solo el toro de lidia tiene la oportunidad de pelear por su vida, ser indultado o de sacar fuera de combate a sus retadores, no te digo qué posición debes tomar; cómete tu lomo y piensa.