Resiembra de caobo y mangle botón en San Andrés
A través de la iniciativa “Estamos Sembrando” se han entregado más de 1.000 semillas a la comunidad y se han sembrado cerca de 60 árboles en la isla del Caribe colombiano.
Una de las especies de árboles que poco a poco se fue desapareciendo en las islas de San Andrés y Providencia ha sido el caobo, un árbol que cuando alcanza la madurez produce madera de excelente calidad.
Michelle Orellano Chica, ingeniera ambiental de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Caribe y coordinadora del proyecto, cuenta que este tipo de árbol fue desapareciendo por el uso que se le daba en la Isla para el desarrollo de la comunidad.
“El caobo es una especie maderable y es una de las más finas que se pueden hallar en el mercado. Este árbol se perdió por la tradición de cortarlo para fabricar barcos y construir casas, y con el paso de los años fue desapareciendo”, explica la ingeniera de la U.N.
Por tal motivo, y para darle una nueva oportunidad a la especie que estuvo sembrada por muchos años en la Isla, la Universidad y su Jardín Botánico desarrollaron la iniciativa “Estamos Sembrado”, que tiene por objetivo repartir semillas tanto de la especie maderable como de la del mangle botón, la cual resiste inundaciones y las condiciones de suelo de esa zona, como la salinidad.
Según la coordinadora del proyecto, por medio del programa se busca acercar más a la comunidad para que sean esta quien conozcan sobre lo que se está sembrando en los suelos, su utilidad y los beneficios hacia el medioambiente, como en el caso de los caobos para que estos vayan repoblando la Isla.
“Trabajamos específicamente con los colegios, para que los estudiantes vean que el herbario principal de San Andrés no es un ente aislado de la U.N., sino que es un recurso académico que cualquier colegio puede solicitar en la Isla para aprender de manera temática sobre medioambiente, biología y técnicas de siembra”.
Esta dinámica consiste en realizar charlas sobre la importancia de las plantas y de la biología en el ecosistema, y después sembrar semillas y árboles. Actualmente se realiza con los colegios de San Andrés: Colegio Rubén Darío, que es la primaria del Colegio El Rancho; el Colegio Phillip Beackman; el Colegio Técnico industrial y en el Banco de la República, donde más de 20 menores y la comunidad participan de estas jornadas para que sea visible a la comunidad y que los isleños se acerquen más a las instituciones.
En lo que va del año se han sembrado más de 60 árboles y se han donado más de mil semillas. Por medio de la donación de semillas y el sembrado se busca hacer extensión solidaria, es decir, “hacer donaciones sin ningún costo, nosotros ponemos el transporte, las plantas, las herramientas, el personal y que la comunidad reciba las plantas y se apropie del cuidado que ellas requieren, que aquí en San Andrés es básicamente echarle agua”, manifiesta, Michelle Orellano.
Este trabajo es realizado en conjunto con la Armada Nacional, la Policía Ambiental y el Jardín Botánico de la U.N., quienes realizan asistencia para arborizar los terrenos que las entidades dispongan.