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El gobierno de Venezuela cambió al presidente del banco estatal que sufrió una caída del sistema

El gobierno de Venezuela anunció hoy que reemplazó al presidente del estatal Banco de Venezuela, menos de dos semanas después de que esa entidad, la más grande del país, sufriera una caída del sistema que impidió percibir sus haberes a miles de trabajadores y que las autoridades atribuyeron a un complot originado en Estados Unidos.

“El presidente Nicolás Maduro ha designado a Román Maniglia, viceministro de Economía Digital, Banca, Seguros y Valores, para que asum la presidencia del Banco de Venezuela”, informó la vicepresidenta ejecutiva del gobierno, Delcy Rodríguez, en Twitter.

La funcionaria justificó el reemplazo “en esta nueva etapa de consolidación del bolívar digital en el marco del proceso de nueva expresión monetaria” que entrará en vigencia este viernes.

El 15 de este mes, el Banco de Venezuela suspendió sus operaciones debido a la caída de su sistema informático, lo que impidió, entre otras cosas, que miles de trabajadores que cobran allí sus haberes quincenales pudieran hacerse de ellos.

Una semana más tarde, Rodríguez afirmó en conferencia de prensa que la caída del sistema se debió a “una serie de ataques, el último de ellos señalado en rojo por la intensidad”, y remarcó que “el origen que deja la huella” de la falla “es Estados Unidos”.

Maniglia, quien sucede en la presidencia del Banco de Venezuela a José Javier Morales, es hijo de la almirante Carmen Meléndez, quien hasta agosto pasado fue ministra de Interior y Justicia y dejó ese cargo para postularse a la alcaldía metropolitana de Caracas en las elecciones de noviembre próximo.

El Banco de Venezuela fue estatizado en 2008 por el presidente Hugo Chávez y a fines de 2020 tenía activos por 3.801,3 millones de dólares y una participación de mercado de 66,8%, según el sitio web especializado Banca y Negocios.

Este viernes entrará en vigencia el bolívar digital, la unidad monetaria que equivaldrá a un millón de los bolívares soberanos actuales.

Se trata del tercer cambio de signo monetario en la historia del país. Los anteriores fueron en 2008, cuando se instauró el bolívar fuerte, equivalente a 1.000 bolívares, y en 2018, cuando comenzó regir el bolívar soberano, equivalente a 100.000 bolívares fuertes.

De ese modo, el nuevo bolívar digital equivaldrá a 100 billones de los bolívares que tuvieron curso legal entre 1879 y 2008.

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