El Gobierno cubano abre consultas para aliviar la crisis económica
El Gobierno cubano se avino a una amplia apertura de diálogo e intercambio en procura de encontrar soluciones a su crisis económica que causó un inesperado descontento popular que derivó en protestas, cuando el bloqueo estadounidense agravó la situación de la pandemia de coronavirus de la isla, se informó hoy oficialmente.
El ministro de Economía y la Planificación, Alejandro Gil, admitió que el Ejecutivo lleva a cabo “conversaciones con “investigadores, profesores y estudiantes universitarios” vinculados a “las ciencias económicas”.
Esto, en un momento en el cual dijo necesitar “escuchar opiniones de personas de distintos sectores” sobre los problemas del país.
A la vez viceprimer ministro, Gil destacó vía Internet su objetivo de “recoger propuestas y analizar nuevos aportes que contribuyan a buscar soluciones”.
El funcionario mantuvo reuniones con distintos sectores en la sede en La Habana de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores, una entidad que apoya al Gobierno con la asistencia del presidente, Miguel Díaz-Canel.
“Este encuentro con economistas de centros de investigación, profesores y estudiantes de @UHabana es el primero de los que se realizarán con varios sectores de la sociedad” esta semana, explicó una nota vía Twitter de un participante, al sugerir su extensión a otras esferas sociales aún no precisadas.
Las consultas fueron asumidas por un economista local consultado por la agencia de noticias ANSA como “una perentoria necesidad” nacional.
“La economía cubana está en un proceso de cambios vigente desde el 1 de enero pasado que fue explicado por el Gobierno como imprescindible para enfrentar complicados problemas internos, entre otros la existencia de una doble moneda, dualidad que fue eliminada” recordó.
La isla, además, “está bajo presión intensa del rebrote de la pandemia” de coronavirus, refirió.
El especialista no desvinculó el encuentro con las protestas ocurridas el 11 y 12 de julio pasado que las autoridades atribuyen a un intento de “golpe blando” contra el sistema político cubano desde Estados Unidos.
“En mi opinión, tampoco puede negarse la existencia de un caldo de cultivo social de descontento que significa una situación muy adversa de la economía con gran repercusión social empeorada por el Covid-19”, expuso.
Oficialmente, el propósito de “recoger” opiniones fue explicado por personalidades gubernamentales que se refirieron a la iniciativa dialoguista como un momento para usar “la ciencia” y los “criterios de expertos” como parte de “una estrategia gubernamental”.