Plazas de mercado se preparan para competir
Comerciantes y administradores de las distintas plazas de mercado públicas de Bogotá reciben formación para aplicar mejoras y optimizar la atención a sus clientes.
Como parte de los proyectos que viene desarrollando la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), 67 comerciantes y administradores se capacitaron en desarrollo del “Diplomado en logística y gestión de la cadena de suministro”.
Según las particularidades de cada plaza y centro de abastecimiento de la capital, se espera que a raíz del Diplomado se comiencen a implementar mejoras asociadas tanto con el aprovisionamiento, el almacenamiento y la distribución de los alimentos, como con la organización y el aseo de sus respectivos puestos de trabajo.
Mientras los transportadores se concentrarán en optimizar los tiempos, los comerciantes tendrán entre sus principales retos mejorar el aprovisionamiento, sistema de empaques, embalajes y almacenamiento, además de establecer los espacios más adecuados para recibir la mercancía.
Entre los programas que viene desarrollando la U.N. para mejorar los procesos productivos en decenas de municipios de Bogotá y Cundinamarca, mediante el Subproyecto de Logística del Corredor Tecnológico Agroindustrial –a cargo del profesor Wilson Adarme– se realizó una serie de cursos y talleres para actores de las plazas de mercado públicas de Bogotá, con el apoyo de profesores y estudiantes de maestría y doctorado de la Institución.
Al respecto, el docente comenta que fue muy alentador que “estas personas, con una formación académica tan heterogénea, decidieran regresar a las aulas y de manera paralela trabajaran en la implementación de los conceptos aprendidos”.
Nuevas estrategias
A partir de un intercambio de saberes entre los participantes y el equipo de profesionales se hizo énfasis en la implementación de nuevas estrategias que permitieran mejorar las operaciones logísticas de los diversos productos que se comercializan en las plazas de mercado, como frutas, verduras, material vegetal, alimentos procesados y alimentos en restaurantes.
Una de las temáticas abordadas fue el desarrollo de una metodología de trabajo a partir de la cual se pudieran llevar inventarios más organizados y depurar las técnicas de despacho. Para ello se manejó un lenguaje ajustado al contexto natural en el que se dan estas operaciones.
El reto de llevar conceptos técnicos a la operación del día a día implica un esfuerzo pedagógico importante en un ambiente en el que la logística se desarrolla a partir de las prácticas cotidianas y no de las bases teóricas de esta área de conocimiento, destaca Juan Pablo Castrellón, profesor del Diplomado.
Además de los mecanismos para reducir el nivel de desperdicios que se generan a lo largo de toda la operación, se abordaron otros aspectos como la selección de los proveedores, el almacenamiento, la rotación de inventarios y el sistema que tienen para efectuar nuevos pedidos.
El Diplomado consideró importante buscar mejoras en la manera de concibir las plazas de mercado en el actual sistema de logística urbana, con el propósito de desarrollar una mejor interacción con la ciudad.
En forma paralela, el curso consideró la implementación de un sistema de trazabilidad de los productos que permita establecer su estado gracias al uso de herramientas como códigos de barras y de respuesta rápida (QR), además de mejorar las condiciones ambientales, puntualiza el profesor Javier Orjuela.