Pentágono admite que desacreditó las vacunas de China contra la COVID-19
WASHINGTON, 26 de julio. /TASS/. El Departamento de Defensa de EE.UU. admitió que se dedicó en Filipinas a desacreditar la vacuna china contra el coronavirus Sinovac, informó la agencia Reuters citando un documento gubernamental que aún no se ha hecho público.
“Es cierto que [el Departamento de Defensa de EE.UU.] difundió mensajes a los filipinos cuestionando la seguridad y eficacia de Sinovac”, cita la agencia un extracto del documento basado en el Pentágono, así como en el Ministerio de Exteriores y el de Defensa filipinos. El texto también afirma que el Pentágono admitió que “cometió algunos errores en la difusión de información sobre la COVID-19”.
Según el documento, la parte estadounidense llegó posteriormente a la conclusión de que la campaña de desprestigio de las vacunas no se corresponde con las prioridades de Estados Unidos, señala Reuters. El documento indica que el Ejército estadounidense informó a la parte filipina que “dejó de difundir información relacionada con el origen de COVID-19 y las vacunas COVID-19 en agosto de 2021”.
Boicot contra las vacunas
La agencia informó en junio que sus periodistas encontraron unas 300 cuentas en la plataforma X, creadas a inicios de 2020, que publicaban mensajes provocadores instando a “no confiar en China” y a no usar vacunas chinas, ya que el virus se descubrió por primera vez en China. La campaña fue más activa en Filipinas. Además del sudeste asiático, la campaña también estuvo enfocada en Asia Central y Oriente Medio. Varias plataformas difundieron publicaciones en las que se afirmaba que las vacunas chinas contenían gelatina de cerdo, lo que las hacía inadecuadas para su uso en países musulmanes. Sinovac negó estas acusaciones.
Las actividades para desacreditar las vacunas fabricadas en China tuvieron lugar desde la primavera de 2020 hasta mediados de 2021. Comenzaron durante el mandato de Donald Trump como presidente de Estados Unidos y continuaron después de que el actual líder estadounidense, Joe Biden, asumiera el cargo.
Fuentes involucradas en la planificación e implementación de la campaña declararon a Reuters que el Pentágono ignoró los posibles efectos negativos de esta acción, incluido un aumento de las muertes por COVID-19.
Campaña de desinformación contra Sputnik
Anteriormente, el Fondo Ruso de Inversión Directa informó de una campaña coordinada contra la vacunación en Rusia y contra el lanzamiento de la vacuna Sputnik en los mercados extranjeros. La campaña se llevó a cabo a través de diversos canales de desinformación, incluidas cuentas falsas, fuentes anónimas y expertos parcializados. Estos intentos conllevaron un llamamiento a los rusos para que rechazaran la vacunación y también dificultaron la promoción de Sputnik en los mercados extranjeros, negando así el acceso a ella a los países necesitados y a sus ciudadanos.
Desde el inicio del registro de la vacuna Sputnik V, el Fondo Ruso de Inversión Directa ha registrado más de 300 ataques informativos contra vacunas de esta clase. Para combatir la desinformación, el Fondo inició más de 50 estudios y publicaciones científicas sobre las vacunas rusas. Se publicaron artículos en las principales revistas médicas internacionales, como The Lancet, Nature, Vaccines, Cell Reports Medicine, y resultados comparativos del uso de Sputnik en varios países, como Hungría, Argentina, México y San Marino, donde la vacuna rusa demostró los mejores resultados. Además, a través de la cuenta oficial de la vacuna en la red social X (antes Twiter), que obtuvo cerca de un millón de seguidores, se comunicó a la comunidad periodística internacional información sobre el éxito del uso de Sputnik.