EEUU intensifica advertencias para las empresas que quieran hacer negocios en la región china de Sinkiang
El Gobierno de EEUU ha señalado que China ha estado cometiendo un genocidio contra la población minoritaria musulmana uigur de Sinkiang.
Por: Michael Hernández / Anadolu
Estados Unidos aumentó este martes 13 de julio su nivel de cautela hacia las empresas que buscan hacer negocios en la provincia china de Sinkiang, a las que advirtió sobre las prácticas de trabajo forzoso generalizadas y los continuos abusos de derechos en la región.
“Dada la gravedad y el alcance de estos abusos, incluido el trabajo forzoso generalizado patrocinado por el Estado y la vigilancia intrusiva que tiene lugar en medio del genocidio y los crímenes de lesa humanidad en curso en Sinkiang, las empresas y las personas que hagan parte de las cadenas de suministro, empresas y/o inversiones conectadas a Sinkiang, podrían correr un alto riesgo de violar la ley estadounidense”, destacó el aviso del Gobierno de EEUU.
La advertencia, emitida originalmente en 2020, se está reforzando para decirles a las empresas que hacen negocios en Sinkiang que corren el riesgo de infringir las leyes estadounidenses que prohíben a las empresas beneficiarse a sabiendas del trabajo forzoso, incluso si lo hacen indirectamente.
Los Departamento de Estado, Tesoro, Seguridad Nacional y otras tres agencias ahora están diciendo a las empresas que “es probable que enfrenten obstáculos para llevar a cabo la debida diligencia para identificar plenamente y evitar la complicidad en los abusos de derechos humanos relacionados con Sinkiang”.
Eso se debe en parte, según las agencias estadounidenses, a la falta de transparencia del Gobierno (chino) y de las empresas, y a “una atmósfera de estado policial en Sinkiang”.
“Las empresas y las personas deben considerar estas dificultades, así como cualquier señal de advertencia y los informes creíbles de la prevalencia del trabajo forzoso y otros abusos de los derechos humanos en la región”, destacó el aviso.
La advertencia se extiende más allá de las empresas estadounidenses y también está dirigida a empresas de capital riesgo y de capital privado.
Estados Unidos, bajo la administración del expresidente Donald Trump, determinó que China estaba cometiendo un genocidio contra la población minoritaria musulmana uigur de Sinkiang, determinación que ha continuado bajo la administración del presidente estadounidense Joe Biden.
El Gobierno chino ha negado habitualmente la existencia de campos de concentración, a pesar de que existen pruebas contundentes. Se cree que hasta un millón de musulmanes uigures están detenidos en estos campamentos.
Pekín afirma que los campamentos son “centros de reeducación”, los cuales fueron construidos para reformar a la población local y enseñar nuevas habilidades.
Sin embargo, sobrevivientes y exdetenidos han hablado de actos de tortura brutales e inhumanos, tanto físicos como psicológicos, incluidas esterilizaciones forzadas de mujeres uigures.
*Juan Felipe Vélez Rojas contribuyó con la redacción de esta nota.