En cumbre semivirtual, líderes iberoamericanos buscan respuestas comunes frente al coronavirus
En pleno embate del coronavirus en América Latina, el presidente Alberto Fernández y los demás líderes regionales buscarán respuestas colectivas a la pandemia y su impacto económico en la Cumbre Iberoamericana semipresencial que comienza mañana en el principado europeo de Andorra.
En un formato sin precedentes desde la celebración de la primera cumbre de la Comunidad Iberoamericana de Naciones, hace 30 años, mandatarios de solo cinco de los 22 países del grupo estarán presentes en Andorra para el encuentro, que los demás seguirán de manera virtual.
Al evento, que tiene lugar con retraso de un año debido a la pandemia, le precedieron reuniones de cancilleres, de empresarios y de ministros de salud de los Estados miembros de manera telemática, algo que favoreció su organización.
Solo estarán presentes en Andorra los presidentes de Guatemala y República Dominicana, por ser sus países la sede de la anterior cumbre y de la próxima, y los jefes de Gobierno de Andorra, Portugal y España, así como el rey de este último país, Felipe VI.
Dieciséis de los 19 mandatarios de la región ya confirmaron que se dirigirán al pleno, entre ellos Alberto Fernández, según la organización.
Solo Jair Bolsonaro de Brasil, Andrés Manuel López Obrador de México y Mario Abdo Benítez de Paraguay declinaron pronunciarse en la cita, que marca tres décadas de cumbres iberoamericanas, desde que se inauguraron en 1991 en México.
La plenaria del encuentro tendrá lugar en un hotel de Soldeu, localidad rodeada por pistas de esquí.
Está confirmado que tomará parte el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, una presencia que desata polémica ya que la legitimidad de su Gobierno es cuestionada por países como España, Brasil, Chile, Colombia o Perú, que consideran presidente interino al opositor Juan Guaidó.
En la cumbre hablará también el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ungido ayer formalmente como nuevo líder del Partido Comunista Cubano (PCC), según fuentes del Gobierno español citadas por la agencia de noticias AFP.
En un principio, el lema del encuentro -que desde 2014 tenía lugar cada dos años- iba a ser “La innovación para el desarrollo sostenible”, pero la crisis de la Covid-19 hizo imperativo que se le añadiera: “Iberoamérica frente al reto del coronavirus”.
Según la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, más allá de las divergencias políticas en la heterogénea región, el objetivo de la reunión es que de ella salgan respuestas consensuadas y concretas a la pandemia y a la debacle económica producida por esta.
América Latina, con el Caribe incluido, es la segunda región del mundo más golpeada por la Covid-19, con 865.000 fallecidos y 27,2 millones de contagios, apenas por detrás de Europa, con 1 millón de muertos y unos 48 millones de casos.
Debido a la pandemia, la región sufrió en 2020 un desplome de su PIB del 7%, la más pronunciada del mundo según el FMI, y podría haber perdido 2,7 millones de empresas, a juicio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La caía representa ·una década de retroceso en nuestro PIB per cápita, 15 años en nuestros índices de pobreza y 30 años en pobreza extrema”, resumió Grynspan.
Por ello, el objetivo clave de la cumbre es alcanzar posturas comunes frente a la pandemia, con prioridad en ampliar el acceso a las vacunas, en una región que solo pudo vacunar al 9% de su población, aun con casos destacados como el de Chile, donde un 35,7% de la población objetivo ya tiene la pauta completa.
Se espera de la cumbre un llamado firme al “acceso universal a la vacunación como un bien público global”, y a “fortalecer” el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud para una distribución equitativa de las vacunas, señaló Grynspan.
Para facilitar el acceso de la región a la financiación para la recuperación, el encuentro debería respaldar el aumento de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI, que pondría a disposición de la región más de 70.000 millones de dólares para fortalecer sus reservas.
También se planteará que los países desarrollados que no necesiten sus DEG, los puedan ceder a otras naciones.
Se debatirá el tratado internacional de pandemias, que impulsan varias decenas de gobernantes, y un Observatorio Iberoamericano contra la violencia de género, para agilizar las acciones contra este flagelo.
La sesión plenaria de la cumbre está prevista el miércoles a las 14 (las 11 en la Argentina) y se prevé que finalice a las 19, cuando tendrá lugar la rueda de prensa final.