Cartagena ‘La Inconclusa’
Esta es mi columna de hoy en la edición impresa del diario La Verdad:
A nivel mundial, Cartagena es conocida como “La Heroica” y Carlos Vives la llamó “La Fantástica”, pero en mi opinión, en este momento, Cartagena es “La Inconclusa”. Es una ciudad que se encuentra a medias, donde los proyectos más importantes, vitales y necesarios para la ciudad aún no han sido terminados, a pesar de que han estado en desarrollo durante décadas. Ningún alcalde ha tenido la capacidad de gestión suficiente para llevarlos a cabo.
El primer proyecto del cual quiero hablar es el “desafortunado” Plan de Ordenamiento Territorial (POT), del cual se habla constantemente pero nunca se entrega listo. El POT actual fue elaborado por el tres veces alcalde Nicolás Curi en el 2001. Desde hace 16 años, todos los alcaldes han enviado a sus Secretarios de Planeación para rendir cuentas ante el Concejo Distrital sobre qué se está haciendo para tener un nuevo POT, pero todos han dado la misma respuesta durante 16 años.
Van y muestran al Concejo de la ciudad los contratos de asesoría y consultoría firmados con personas del interior del país e incluso extranjeros, a quienes han contratado para realizar todos los estudios necesarios para elaborar el POT de la ciudad y entregarlo elaborado.
¿Cuántos estudios sobre el POT se han elaborado en 16 años? ¿Cuántas personas han sido contratadas para este proceso? ¿Cuánto dinero se ha invertido en un POT inconcluso que nunca ha estado listo?
En 16 años, la ciudad ha cambiado y crecido sin un POT adaptado a la realidad de Cartagena. ¿Por qué es importante el POT? Algunos se preguntarán. En palabras sencillas, el POT le da dirección y rumbo a una ciudad. La organiza para que crezca tanto urbanística como socialmente de manera sostenible, equitativa y acorde a las necesidades particulares de la ciudad.
Para nadie es un secreto que Cartagena está creciendo desordenadamente, sin control alguno, en todas las direcciones. No se ha definido de manera clara el uso adecuado del suelo en la ciudad, lo que resulta en la presencia de un comercio excesivo y, en algunos casos, entretenimiento nocturno en zonas residenciales (según el POT de 2001).
Es por eso que se construyen edificios de más de 10 pisos cerca de nuestro patrimonio histórico, aunque en este caso entra en juego otro proyecto inconcluso: el PEMP, del que hablaremos en otra oportunidad.
Lo que se consideraba zona rural en el POT de 2001 ahora es zona residencial de estrato 5. En la zona norte, ¿deben pagar impuestos como zona rural o como zona residencial de estrato 5?
Sin embargo, que Cartagena sea “La Inconclusa” no es culpa de una sola persona, ni de un solo alcalde a quien podamos señalar y satanizar.
En mi opinión, son cientos los culpables del estado actual de Cartagena, desde los alcaldes y concejales que han pasado en los últimos 16 años, con excepción de algunos pocos, como el concejal César Pión, quien ha luchado incansablemente por un nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT). Sin embargo, parece que al resto de sus compañeros concejales no les importa tener un POT. Prefieren leer siete libros y medio. ¡Vaya concejales tan “letrados”!
Los gremios también tienen su parte de culpa, ya que no les conviene un nuevo POT que pueda cambiar el uso del suelo donde tienen ubicados sus negocios y aumentar sus impuestos, entre otras cosas.
Y por supuesto, todos somos culpables, los cartageneros, porque nos ha importado muy poco si tenemos un POT o no. El tema es que la mayoría del pueblo no ha exigido su cumplimiento y por eso no somos ni ‘Los Heroicos’ ni ‘Los Fantásticos’, sino ‘Los Inconclusos’.
El pueblo recibe lo que demanda, por lo tanto, todos tenemos nuestra parte de responsabilidad en la situación actual de Cartagena. Los alcaldes, concejales y gremios tienen su papel, pero nosotros, como ciudadanos, también debemos asumir nuestra responsabilidad y hacer nuestra parte para exigir el cumplimiento de los proyectos que son vitales para nuestra ciudad. Solo así podremos convertirnos en una verdadera ciudad heroica y fantástica.