Problemática de la preparación social para la IV Revolución Industrial
Las tres primeras revoluciones industriales originadas en: la máquina a vapor, la electricidad y los ordenadores; han estado definidas por los avances tecnológicos específicos, que las han posibilitado desarrollos respectivos. Pero la actual IV Revolución Industrial, se caracteriza por el desarrollo paralelo de tecnologías –aparentemente- independientes, en la cual, cada una tiene la posibilidad de cambiar el mundo. Como sería el caso, por ejemplo, de hacerlo de manera independiente: la inteligencia artificial; la robótica; la automatización; etc.
Pero, es una postura que se debe manejar con cuidado, ya que, a su vez, cada una tiene implícito desafíos a resolver. Un ejemplo puede ser el del auto autónomo, sin conductor, Pese a las pruebas efectuadas en Arizona (USA), se han llamado a la mesura, ya que en determinado momento de sus recientes ensayos no detecto la presencia, en su camino, de una mujer, en su bicicleta y la mató. El laser, que debía haberla advertido, no funcionó. Ese caso es el ejemplo de que se debe ser cuidadoso en el manejo de las nuevas tecnologías, ya que, a veces, no pueden advertirse el estado de los riesgos y también, oportunidades, preexistentes.
Como se ha señalado desde esta columna, la IV Revolución Industrial, implicará transformaciones para nuestra forma de vida, de trabajar y de gobernarnos. No solamente hay nuevas oportunidades, sino que además existen diferentes riesgos a considerar. Uno de los problemas a enfrentar es. Como preparar, en la innovación, a los dirigentes del mañana. Los cambios llegan rápidamente, lo que obligará a resolver, hasta nuevos problemas de ética. Además deberá existir una preparación para poder aprovechar las nuevas oportunidades. ¿Cómo se podrá hacer con los empleos que dejarán de existir?
Las necesidades institucionales de ese cambio, afectarán, por ejemplo, nada menos que instituciones de formación, como ser: la Universidad o la Escuela, con sus varios siglos de funcionamiento. Deberán ellas, considerar nuevos fundamentos de la enseñanza, priorizando la búsqueda fundamental, para poder reconocer la evolución de las novedades, para atender futuras nuevas necesidades. La metodología a utilizar, deberá tener un objetivo de rapidez y encarada a reconocer tecnologías cada vez más potentes y sus correspondientes aplicaciones, para enfrentar diferentes necesidades. Esto constituye un verdadero desafío ya que debe buscarse una preparación que permita una búsqueda académica calificada y la correspondiente atención rápida, ante una nueva necesidad.
Uno de los problemas difícil de resolver, es que los jóvenes de hoy tengan una visión sobre su futuro, ya que el empleo en el que seguramente actuarán, no existe. Por otra parte sus mayores tienen, al respecto, un desconocimiento mayor. Lo que sí se puede anticipar es que los individuos del mañana, ocuparán diferentes empleos, lo que los obligará a estar en permanente proceso de formación