250,000 CRIMINALES
El Ejército de Colombia es un ente criminal, liderado por criminales. A cada rato están saliendo coroneles y generales envueltos en violaciones de todo tipo que van, de falsos positivos, a corrupción con el Ñeñe Hernández pasando por narcotráfico y paramilitarismo.
Obviamente, una fuerza tan pobremente liderada conduce a una tropa con comportamientos igual de pobres. La semana pasada fue un soldado lanzando un perro como un boomerang, algo que ni siquiera se puede explicar porque no corresponde a ningún tipo de entrenamiento. Es puro y simple sadismo, un comportamiento aberrante de unos individuos aberrantes.
Y entro hoy a leer noticias de Colombia y leo que 7 soldados en Risaralda dizque violaron a una niña Embera de 13 años.
En Colombia los indios y los perros entran en el mismo costal, y los que deberían protegernos, son los que más nos asustan.
Bueno, mi estimado Presidentucho de pacotilla, ahora ya tienes un instrumento para castigar a esos violadores: la cadena perpetua de la que tanto te ufanaste hace un par de semanas. Vamos a empezar con estos papayos, cadena perpetua para los 7.
Y si me preguntan, metanle cadena perpetua también al que tiro el perro.
¡Ajúa!, General Zapateiro, otra más para su cuenta personal.
P.D: Ayer me mandaron el vídeo de “Semana en Vivo” en donde Gonzalo Guillen y el abogado Miguel Ángel Del Río explican las maniobras del Gobierno y la Fiscalía para matar la investigación de la Ñeñe-Politica.
Es tan obvio todo lo que están haciendo para no entregar esos audios, que queda claro que Duque es culpable de la compra de votos y que Barbosa está tapándole la cagada.
Pero existen más copias de esos audios por fuera de la Fiscalía, y si la Fiscalía no le entrega esos audios al abogado Del Río, va a ser peor, porque los audios van a salir de todas maneras a la luz pública, y Duque y Barbosa van a quedar expuestos como los criminales que son. En otras palabras, los tienen cogidos de la güevas.
Este gobierno es ilegítimo por el ángulo que se mire. Todos en la cúpula tienen su propio escándalo, ¡todos!
*Las opiniones expresadas en este documento no han sido sometidas a revisión editorial, son de la exclusiva responsabilidad de los autores y pueden diferir con las de The Cartagena Post.
